Tiempo atrás tuve la oportunidad de ir a una escuela primaria a explicar en qué consiste lo que hago, la verdad me sentía nervioso pues los niños suelen ser duros críticos y aunque fue una charla de 15 minutos no quería perder su atención y convertir el salón de clases en una guerra campal.
Comencé la plática con algunas preguntas, ¿A quién le gustan las computadoras? ¿Quién tiene iPad? ¿Quién tiene celular? Se levantaron muchas manos descubriendo de buena fuente que todos tienen un elevado acceso a la tecnología. Sin embargo, me di cuenta más adelante que poco saben sobre cómo es que toda esa tecnología ha sido creada, no conocen cómo funciona, quiénes desarrollaron esos productos y mucho menos conocen a personajes como Bill Gates, Mark Zuckerberg, Elon Musk, Steve Jobs, etc. y qué pasa realmente detrás de todos esos aparatos que tanto disfrutan.
A mi parecer la plática les pareció interesante ya que les conté de todo lo que hace un programador, apps, videojuegos y aplicaciones, por sus caras me doy cuenta que todo esto les encanta y es parte de su día a día.
Pero pueden los niños ir más lejos, podrían ellos realizar programas y sobre todo brincar del lado de enfrente de la pantalla al lado de atrás convirtiéndose en creadores y manipuladores de tecnología y dejar de ser solo usuarios.
Existen iniciativas alrededor del mundo que buscan incrementar el número de creadores de tecnología debido a que se tiene identificado como un problema serio en la industria la falta de talento, falta de personas capacitadas y con las habilidades necesarias para construir, manipular y utilizar la tecnología de forma adecuada. Vemos en la actualidad cientos de vacantes de programador de las más variadas tecnologías sin cubrir y cada vez tenemos más usuarios, avances tecnológicos y nuevos dispositivos que van a requerir cada vez más y más técnicos. El déficit de especialistas en tecnología se eleva conforme la tecnología avanza, porque es más fácil ser usuario que ser constructor de tecnología.
La tecnología es compleja, si la vemos como usuario todo es sencillo pero por dentro, en la esencia de ese programa o dispositivo suceden una infinidad de cosas difíciles de comprender. Lo preocupante es, que va a pasar cuando la tecnología tome un mayor control sobre la vida de las personas, con autos que se manejan solos, puertas que se abren, robots que realizan acciones y un sin número de procesos automatizados en las organizaciones.
Es necesario que los pequeños aprendan a programar para que logren dominar la tecnología antes de ser dominados por ella. Actualmente existen muchos dispositivos para dar los primeros pasos en programación, como Lego Mindstorm, Piper, por ejemplo.
Hace algunas semanas una mamá me preguntaba que si a su hijo le gustaban los videojuegos entonces él podría ser ingeniero y me miró con tristeza cuando le dije que no necesariamente, la ingeniería requiere curiosidad, ingenio, ganas de aprender y ganas de esforzarse por descubrir el enorme mundo que existe detrás de cada componente, tecnología y lenguaje de programación.
En esta navidad no solo regalemos tecnología, regalemos herramientas que permitan a los niños desarrollar y entender la tecnología.
Porque los niños del futuro no solo deben, necesitan programar.
Comencé la plática con algunas preguntas, ¿A quién le gustan las computadoras? ¿Quién tiene iPad? ¿Quién tiene celular? Se levantaron muchas manos descubriendo de buena fuente que todos tienen un elevado acceso a la tecnología. Sin embargo, me di cuenta más adelante que poco saben sobre cómo es que toda esa tecnología ha sido creada, no conocen cómo funciona, quiénes desarrollaron esos productos y mucho menos conocen a personajes como Bill Gates, Mark Zuckerberg, Elon Musk, Steve Jobs, etc. y qué pasa realmente detrás de todos esos aparatos que tanto disfrutan.
A mi parecer la plática les pareció interesante ya que les conté de todo lo que hace un programador, apps, videojuegos y aplicaciones, por sus caras me doy cuenta que todo esto les encanta y es parte de su día a día.
Pero pueden los niños ir más lejos, podrían ellos realizar programas y sobre todo brincar del lado de enfrente de la pantalla al lado de atrás convirtiéndose en creadores y manipuladores de tecnología y dejar de ser solo usuarios.
Existen iniciativas alrededor del mundo que buscan incrementar el número de creadores de tecnología debido a que se tiene identificado como un problema serio en la industria la falta de talento, falta de personas capacitadas y con las habilidades necesarias para construir, manipular y utilizar la tecnología de forma adecuada. Vemos en la actualidad cientos de vacantes de programador de las más variadas tecnologías sin cubrir y cada vez tenemos más usuarios, avances tecnológicos y nuevos dispositivos que van a requerir cada vez más y más técnicos. El déficit de especialistas en tecnología se eleva conforme la tecnología avanza, porque es más fácil ser usuario que ser constructor de tecnología.
La tecnología es compleja, si la vemos como usuario todo es sencillo pero por dentro, en la esencia de ese programa o dispositivo suceden una infinidad de cosas difíciles de comprender. Lo preocupante es, que va a pasar cuando la tecnología tome un mayor control sobre la vida de las personas, con autos que se manejan solos, puertas que se abren, robots que realizan acciones y un sin número de procesos automatizados en las organizaciones.
Es necesario que los pequeños aprendan a programar para que logren dominar la tecnología antes de ser dominados por ella. Actualmente existen muchos dispositivos para dar los primeros pasos en programación, como Lego Mindstorm, Piper, por ejemplo.
Hace algunas semanas una mamá me preguntaba que si a su hijo le gustaban los videojuegos entonces él podría ser ingeniero y me miró con tristeza cuando le dije que no necesariamente, la ingeniería requiere curiosidad, ingenio, ganas de aprender y ganas de esforzarse por descubrir el enorme mundo que existe detrás de cada componente, tecnología y lenguaje de programación.
En esta navidad no solo regalemos tecnología, regalemos herramientas que permitan a los niños desarrollar y entender la tecnología.
Porque los niños del futuro no solo deben, necesitan programar.
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